Tu sistema de productividad completo

Buenas,

Antes de nada, quiero pedirte un favor.

Responde a este email con la temática que quieras que haga la semana que viene.

Te doy estas opciones:

  • Cómo dormir bien para rendir mejor

  • Por qué la muerte no es mala

  • La importancia de la respiración

  • Cómo saber si vas por buen camino

Te leo.

Ahora sí, con este email concluimos esta miniserie.

Hoy te voy a hablar de cómo puedes empezar a hacer tu sistema de productividad.

Para no cambiarlo 254 veces y frustrándote por el camino.

Aunque siempre necesitará algunos retoques, debido a que tu y tus necesidades irán evolucionando con el tiempo.

Cada persona es única y lo que a mi me funciona puede (casi seguro estoy) que lo tengas que adaptar a tu forma de ser.

Pero esta es una buena base por la que empezar.

Capítulo final: El tejado

Últimamente me ha empezado a interesar la perspectiva de ver la productividad como un juego y hacer mi trabajo con diversión.

Este punto de vista se lo tengo que agradecer a Ali Abdaal, un youtuber inglés de productividad que dice lo siguiente:

“¿Por qué importa la diversión?

  1. Transforma las tareas rutinarias: Convertir una tarea mundana en un juego puede hacer que pase de ser agotadora a estimulante.

  2. Aumenta la retención y el aprendizaje: Hay una razón por la que tu asignatura favorita en la escuela era probablemente en la que más destacabas. El cerebro funciona mejor cuando siente curiosidad y se involucra.

  3. Desata la creatividad: Cuando abordas tu trabajo de forma lúdica, te abres al pensamiento creativo y a avances inesperados.”

Y creo que tiene bastante razón.

Por eso, desde hace un tiempo he intentado aplicar esta filosofía a mi vida.

Y he de decir, que hasta ahora ha funcionado.

Ya que con esta idea en mente, no te castigas tanto al no hacer una tarea (porque sí, siempre vas a dejar de hacer cosas que sabes que las tienes que hacer; somos humanos), porque no es tan agobiante como la mentalidad de que todo tiene que estar hecho a base de dura y férrea disciplina.

Al preguntarte: "¿Cómo sería esta tarea si fuera divertida?", puedes cambiar radicalmente tu enfoque.

Ya sea convirtiendo un análisis de mercado en un juego de encontrar el error del mercado donde puedes colarte o transformando una tarea repetitiva en una oportunidad de hacerla cada vez de una forma diferente para ver hasta dónde puede llegar tu imaginación.

Encontrar la diversión en este tipo de tareas soporíferas puede conducir a un trabajo más atractivo, agradable y gratificante.

Este enfoque hace que no nos centremos tanto en el fracaso.

Así, cuando se da menos importancia al fracaso, es más probable persistir y tener éxito.

Aborda tus tareas con menos seriedad y más sinceridad.

Encuentra la alegría en el acto de hacer, independientemente del resultado.

Esta es la base que aplico a todo lo que hago.

Y es la base que quiero que explores para hacer tu sistema de productividad a partir de ahora.

Esto es todo lo que necesitas de momento para ponerte en marcha cuanto antes como te dije en el último email.

Oye,

Que puedes seguir como hasta ahora y obtendrás los mismos resultados que hasta ahora.

Yo no te lo voy a impedir.

Pero, ¿qué te cuesta probarlo una sola vez?

A partir de aquí, nos podemos perder en un océano de herramientas como Notion, Obsidian, Trello, Google Calendar, Zapier, un cuaderno y boli…

La lista continúa.

Unas para poner todo tu conocimiento en un solo lugar, otras para planificar tu vida, otras para hacer un seguimiento de tus tareas y hábitos…

Esta lista también continua.

Y como he dicho antes, cada uno somos diferentes, por lo que cada uno tiene sus necesidades, manías y preferencias.

Olvídate de la receta mágica de 3 pasos y 5 aplicaciones que te harán productivo.

Eso es para aficionados mal informados.

Céntrate en tus metas y el por qué de ellas (lo que hablamos en emails anteriores sobre la motivación), dirigir tu energía hacia el camino correcto y aderezarlo todo con un poco de diversión.

Así tendrás tu sistema productivo listo y duradero en el tiempo.

Se consciente de por qué lo haces e intencionado con lo que haces.

Gracias por tu tiempo y nos vemos la semana que viene.