El antipomodoro

Buenas,

El Pomodoro.

Seguro que has oído hablar de esta técnica de productividad.

Yo diría que es una de las técnicas que más escuchas cuando estás empezando en este mundillo.

Sobre todo porque es muy sencilla de entender y aplicar.

Pero para quien no lo sepa, esta técnica consiste en trabajar durante un periodo de tiempo determinado y luego descansar unos minutos entre periodos de trabajo.

Lo que se recomienda son 25 minutos de trabajo enfocado (ojo con esta palabra) y 5 minutos de descanso.

Y cada 4 ciclos (un ciclo son 30 min => 25 +5), hacer un descanso mayor.

Pero hace unos meses me encontré con un video de Youtube donde se referían al Antipomodoro.

Y dirás: “Guille, ya me lo has dicho 2 veces. Pero, ¿qué es eso?“

Tranquilo que es todavía más sencillo que el Pomodoro tradicional.

En el Pomodoro tradicional te limitas un tiempo determinado para trabajar y descansar.

Bueno, pues en el Antipomodoro, lo que haces es poner un cronómetro para ver hasta dónde llegas.

O sea, cuentas el tiempo que puedes estar enfocado hasta que notas que empiezas a distraerte.

Sencillo, ¿no?

Ya te lo había dicho.

Además tiene varias ventajas adicionales.

Por ejemplo, no te limita a cumplir estrictamente con un tiempo fijo.

Ya sabes que entrar en ese estado de flow donde no existe el tiempo no es fácil.

Y si además tienes una alarma que te pega un susto justo cuando estás entrando es ese estado, tú me dirás.

Lo segundo es que puedes tomártelo como un reto o un juego.

Si la primera vez que lo practicas sólo llegas a 20 minutos de concentración, puedes ponerte como objetivo para la siguiente llegar a 25 min. y así sucesivamente.

Si quieres puedes contestarme con el tiempo que haces en tu primer intento.

Yo hice unos 45 minutos.

Otra ventaja muy relacionada con la primera, es que no te sientes atrapado en un ciclo de alarmas.

Tu cuerpo y mente son tu alarma.

Solo tienes que llegar al punto de empezar a distraerte o haber terminado la tarea para poder relajarte unos minutos.

Eso significa que no tienes que correr para terminar, en ese ciclo, la tarea que estás haciendo porque no te gusta dejarla a medias.

Porque si la dejas a medias implica pensar en ella durante tu descanso.

Y yo a eso no lo llamo descanso.

¿No se tu?

Y por último, también ligado a este último punto, si acabas antes de tiempo esa tarea que estabas haciendo, puedes decidir tomar tus 5 minutos de relax en ese momento.

Porque tu y yo sabemos que cuando eso pasa y tienes que rellenar el tiempo restante, lo único que hacemos es perder el tiempo con alguna tontería.

Eso pasa en el trabajo y eso pasa en el Pomodoro tradicional.

Espero que esto te haya ayudado a darte cuenta de que no todo son reglas estrictas.

De que no siempre hay que hacer caso a lo que todo el mundo dice.

De que siempre hay una alternativa para cada persona.

Y que el Pomodoro tradicional es un asco y el Antipomodoro es mejor.

Nah, es broma.

Elije el que más se ajuste a tu forma de ser.

Gracias por tu tiempo y nos vemos la semana que viene.

PD: Yo uso el Pomodoro de toda la vida, aunque algo modificado. Pero eso será en el siguiente email.